Según el Informe Anual 2024 de la institución, el Estado recibió 895,5 millones de euros de estos ingresos, a través de 673 millones de euros distribuidos entre los beneficiarios y 211,6 millones de euros procedentes del impuesto de timbre, un máximo histórico para este impuesto sobre las ventas de lotería.
Según el informe, "el año 2024 registró el mayor valor histórico de premios pagados por Jogos Santa Casa a los apostantes, con un total de 2.073,20 millones de euros".
El buen comportamiento de los juegos de lotería también se tradujo en un récord de 247,9 millones de euros en comisiones pagadas a los agentes, la mayoría de los cuales son pequeñas empresas familiares. Esto ha tenido un notable impacto en las economías locales y en el empleo.
Paulo Sousa, proveedor de Santa Casa, reveló que, al asumir el cargo, la junta se encontró con un importante descenso de la actividad de la lotería en comparación con 2023. Una de las principales prioridades era invertir rápidamente esta tendencia.
Entre las principales medidas adoptadas figuran la resolución de los problemas de accesibilidad a determinados juegos, la ampliación de la red de agentes, que actualmente cuenta con unos 5.000 en todo Portugal, tras más de una década sin un crecimiento significativo, y la inversión de más de 20 millones de euros en la modernización de la plataforma tecnológica de venta al por menor.
Sousa también destacó que en 2024 se registró el mayor volumen de ventas de lotería digital de la historia, reconociendo la creciente importancia de los canales en línea, al tiempo que reafirmó el compromiso de la institución con su red física de minoristas y los términos de su licencia de explotación.
A pesar de los buenos resultados financieros, Sousa reconoció la continua preocupación por la adicción al juego, aunque subrayó que los juegos de lotería social representan sólo el 15% del total de juegos de azar en Portugal. Santa Casa también dispone de un teléfono de ayuda para problemas de ludopatía, aunque más del 65% de las llamadas no están relacionadas con sus juegos. Pidió que se preste más atención al reto social que plantean los juegos de azar en línea.