Igreja Santa Marta, en Ericeira, es el lugar al que acuden los surfistas para pedir protección cuando están fuera del agua. En el pasado, esta iglesia era una hermandad, y la primera versión de la capilla se construyó alrededor de 1400. En 1760, se hizo una reconstrucción y la iglesia adquirió la estructura que se mantiene hoy en día. Con un rico interior barroco, la iglesia mantiene el espíritu de su época.


Esta iglesia tiene una fuerte conexión con los pescadores, ya que era su lugar de culto favorito. Es importante para ellos, guerreros de los mares agitados que amenazan sus vidas mientras trabajan, los pescadores tenían que encontrar un ancla además de la que usan en el barco.

Sin embargo, lo que más se recuerda de esta iglesia es la hermandad, que organizaba diferentes celebraciones y procesiones. Sin embargo, cuando la parroquia empezó a crecer, la hermandad, con el tiempo, empezó a perder gente y ya no se puede encontrar en la iglesia.

Al estar muy cerca del océano, esta iglesia es sin duda un lugar que merece la pena visitar.