En un precioso amarillo, contrastan de maravilla con los edificios y las aceras especiales.
Se instalaron por primera vez en 1901. Estos tranvías están diseñados específicamente para pasar por los estrechos callejones de la ciudad. Siguen siendo un importante medio de transporte tanto para los habitantes como para los turistas. Sus campanas, además de su estética, forman parte esencial del paisaje sonoro de la ciudad.
En la década de 1920, estaban por todas partes en la ciudad, y su número ha disminuido tristemente con el paso del tiempo, a medida que los coches y el metro tomaban el relevo como principales métodos de transporte.
Tal vez quedara la línea más famosa. La línea "28" es muy visitada, sobre todo en verano, ya que es famosa por su belleza y permite disfrutar de vistas espectaculares a lo largo del trayecto.
Pueden verse como un museo abierto. Tanto el interior como el exterior recuerdan al pasado.
¿Ha montado alguna vez en ellos?


