Según los organizadores, la protesta es "Por la liberación de los ciudadanos portugueses secuestrados por Israel, por el fin del asedio ilegal a Gaza y por sanciones que pongan fin a los crímenes contra el pueblo palestino cometidos por el Estado de Israel".

Y añaden: "Tras dos años de genocidio contra el pueblo palestino en Gaza y continuos ataques en Cisjordania, el Estado de Israel sigue atacando, esta vez contra una acción pacífica internacional". El objetivo era la Flotilla Global Sumud, una flotilla marítima compuesta por decenas de pequeñas embarcaciones que partieron de varios puertos del Mediterráneo con destino a Gaza, entre ellas la delegación portuguesa compuesta por Mariana Mortágua, Miguel Duarte y Sofia Aparício.

"El ejército israelí interceptó los barcos en aguas internacionales, un ataque ilegal, en flagrante violación del derecho internacional y del derecho del mar, que constituye una agresión contra Portugal y muchos otros Estados. Fue un secuestro en aguas internacionales y una detención arbitraria e ilegal, cuya liberación inmediata es esencial".

También se llevarán a cabo protestas en todo el país.