Según el ayuntamiento, "ahora que ha terminado la temporada de baño, se están llevando a cabo obras de refuerzo del cordón dunar entre Costa Nova do Prado y Praia da Barra, en la zona que se vio afectada por la alteración del mar y la subida del nivel del mar el pasado mes de febrero".
La operación, responsabilidad de la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente(APA), incluye la alimentación artificial de la playa al sur del espolón de Barra, en una longitud aproximada de 700 metros.
Para reforzar el cordón dunar se están utilizando áridos procedentes de dragados de mantenimiento realizados por el Puerto de Aveiro.
"Esta solución permite reponer la arena y reforzar la protección natural del litoral", subraya el texto.
Además de los escombros dragados, también se retirará un pequeño espolón situado al sur del espolón de Barra, que se considera obsoleto.
Los materiales procedentes del desmantelamiento de este espolón "se reutilizarán para reforzar la raíz del espolón de Barra y mitigar los efectos de la erosión en el cordón dunar de esa zona".
Según la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente, la intervención "pretende proteger y conservar el litoral, actuando como defensa pasiva contra la erosión y anticipando los riesgos agravados por el cambio climático."
El plazo de ejecución estimado tanto para el aporte artificial de arena como para la retirada del espolón sur y la consolidación del espolón de Barra es de aproximadamente un mes, según la autoridad local.
En febrero, el mar avanzó varios metros sobre las dunas, debido a las mareas y al fuerte oleaje, y destruyó parte de la pasarela que unía las playas de Barra y Costa Nova.
En aquel momento, el alcalde de Ílhavo se quejó de que la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente (APA) no intervenía para solucionar el problema (del avance del mar sobre las dunas en esa zona), lamentando que no se hubiera repuesto arena desde 2020, y defendiendo la deposición de sedimentos como medida para contener el avance del mar.