Los datos, publicados conjuntamente con el Comité Portugués de UNICEF, indican que, entre 1990 y 2023, la proporción de niños (hasta 17 años) en la población total disminuyó del 25,2% al 15,7%.
En el mismo período, el número de nacidos vivos por cada mil mujeres en edad fértil disminuyó de 46,5 a 38,8 y la edad media de las mujeres al nacer su primer hijo aumentó de 24,9 a 30,2 años, según la misma fuente.
La tasa de riesgo de pobreza de los niños de hasta 17 años se mantuvo por encima de la observada para la población general, alcanzando el 17,8% en 2023.
El riesgo de pobreza afectó a casi un tercio de la población que vive en hogares monoparentales y a cerca del 28% en el caso de las familias numerosas.
El año pasado, el 3,6% de los niños no tuvo acceso a las consultas o tratamientos dentales que necesitaba y el 4,5% tuvo alguna limitación para realizar actividades consideradas normales para su edad, debido a problemas de salud de larga duración.
En 2024, una quinta parte de los niños vivía en familias que no podían pagar al menos una semana de vacaciones al año, fuera de casa, y una décima parte de los niños no podía participar regularmente en una actividad extraescolar o de ocio.