La Comisión Europea tratará de intervenir en un ámbito que, hasta ahora, ha estado bajo el pleno control de los Estados miembros, pero en el que gobiernos y autoridades locales han fracasado: los alquileres de corta duración. En una entrevista en Bruselas, el comisario responsable de Vivienda, el danés Dan Jørgensen, declaró, citado por Expresso, que ve margen para que el Ejecutivo comunitario proponga normas para tratar de abordar "un problema importante en muchas ciudades."
Por ahora, se niega a dar detalles sobre las propuestas que tiene sobre la mesa, pero garantiza que "presentará políticas", incluso legislativas, para hacer frente a las consecuencias del aumento de este tipo de alquileres, a menudo a través de plataformas como Booking.com y Airbnb, que han sido señaladas como un factor en la disminución del número de viviendas disponibles para alquileres asequibles a largo plazo, también en Portugal.
"Debemos reconocer que la situación es tan grave que ahora tenemos una crisis social en Europa", dijo Dan Jørgensen, señalando que tenemos que "despertar" y "asumir la responsabilidad", y esto se aplica no sólo al gobierno central y las regiones, sino también a la Unión Europea (UE), con un nuevo papel para la Comisión Europea. "Si nosotros, como políticos, no nos tomamos este problema en serio, no reconocemos que es un problema social que requiere acción, entonces los populistas anti-UE ganarán", argumenta, prometiendo "asegurar que los derechos de los inquilinos se toman en serio."