Según el estudio"Panorama del Mercado Inmobiliario", hasta junio se vendieron en Portugal 40.452 viviendas residenciales, lo que supone un aumento del 19% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Lisboa registró 5.415 ventas, un 21% más que en 2024, consolidando su posición como primer mercado del país. Oporto, por su parte, registró 3.721 viviendas vendidas, un 20% más que el año anterior, lo que representa "el mejor comportamiento semestral desde la pandemia".
A pesar de este importante crecimiento de la demanda, Savills cita "signos de estabilización" en los precios, tanto en Lisboa como en Oporto, incluso en el segmento de lujo, "lo que sugiere una ralentización en comparación con las tasas de revalorización de los últimos años".
En el mercado de alquiler, la consultora también apunta a un "aumento significativo" de la oferta: en Lisboa había 5.355 viviendas disponibles, un 32% más que en 2024, y en Oporto, 1.646, un 116% más.
"Esta expansión de la oferta estuvo acompañada por una fuerte demanda y un mayor número de contratos firmados, apoyando una trayectoria de precios más moderada, pero aún positiva", subraya.
Turismo
En el sector turístico, el segmento hotelero "volvió a cobrar protagonismo como uno de los motores del mercado", con un volumen de inversión inmobiliaria de 330,7 millones de euros en el primer semestre, lo que supone un incremento interanual del 16% y una cuota del 27% sobre la inversión total.
Savills informa de la realización de seis operaciones significativas durante el periodo, entre las que destaca la venta del Hotel Miragem en Cascais, adquirido por aproximadamente 125 millones de euros, la mayor operación registrada en el primer semestre del año.
Al mismo tiempo, la industria hotelera nacional siguió creciendo, con la apertura de 21 nuevos hoteles, añadiendo aproximadamente 2.000 habitaciones a la oferta existente.
Comercio minorista
El sector minorista también mostró un "sólido comportamiento" en el primer semestre de 2025, según la consultora.
En los centros comerciales, las ventas acumuladas crecieron un 4,7% y el tráfico aumentó un 0,6%, "lo que indica una recuperación progresiva de la confianza de los consumidores", mientras que en el comercio minorista de calle, especialmente en las zonas prime de Lisboa y Oporto, "la oferta de nuevos espacios de calidad sigue siendo limitada, mientras que la demanda sigue siendo alta, sobre todo en los sectores de la moda y la alimentación".
Según el estudio, "el segmento del lujo ha mantenido su dinamismo, con varias marcas internacionales que buscan entrar o reforzar su posición en Portugal, aunque la falta de oferta de calidad sigue siendo el principal obstáculo para la expansión."
"Las marcas son cada vez más selectivas y exigentes a la hora de elegir las ubicaciones y el diseño de sus tiendas, priorizando experiencias que complementen su presencia online", señala Savills.
En Lisboa, la consultora inmobiliaria afirma que "las principales arterias comerciales han mantenido su atractivo", destacando las calles Garrett, Carmo y Augusta, mientras que en Oporto, las calles Santa Catarina, Aliados y Flores siguen "liderando el comercio de calle y concentrando gran parte de la demanda."