Los cambios afectan directamente a los pasajeros en situaciones clave, como el equipaje de mano y el transporte de líquidos, dos de las áreas que generan más preguntas y conflictos en los controles de seguridad. Y, aunque no se han hecho públicos los datos exactos de crecimiento porcentual, el volumen de búsquedas de "nuevas normas sobre equipaje de mano" ha aumentado sustancialmente en plataformas como Google Trends, lo que refleja el interés y la preocupación de los viajeros por conocer cómo les afectan estos cambios, según AirHelp.

Líquidos

Uno de los mayores cambios se refiere al transporte de líquidos. Recientemente, la Comisión Europea anunció la instalación de nuevos escáneres en los aeropuertos de la Unión Europea, que permitirán llevar líquidos de más de 100 ml en el equipaje de mano. Esta tecnología ya está implantada, o en proceso de implantación, en unos 700 escáneres distribuidos por 21 Estados miembros de la Unión Europea. En aeropuertos como Madrid, Milán, Ámsterdam y Berlín, por ejemplo, ya es posible transportar envases de hasta dos litros sin tener que recogerlos en el control de seguridad. En Portugal, Lisboa es uno de los aeropuertos que recibirán esta nueva tecnología, que se está instalando actualmente.

Cabe señalar que, en las terminales que aún no disponen de esta tecnología, se mantiene el límite tradicional de transporte de envases de hasta 100 ml y un máximo de 1 litro en total.

Equipaje de mano

En cuanto al equipaje de mano, la nueva normativa propuesta por el Parlamento Europeo pretende reconocer el derecho de los pasajeros a llevar a bordo, sin coste adicional, un artículo personal o bolsa de mano (40 × 30 × 15 cm) y un accesorio personal con un tamaño combinado de hasta 100 cm y 7 kg. El objetivo es estandarizar los tamaños del equipaje de mano, eliminando confusiones y costes inesperados en las puertas de embarque. La propuesta se deriva de una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE, que sostiene que el equipaje de mano no debe acarrear costes adicionales, siempre que respete unos límites razonables.

En este contexto, AirHelp subraya que el equipaje de mano "es un derecho básico de los pasajeros y no puede convertirse en una fuente de recargos abusivos por parte de las compañías aéreas."

"Las nuevas normas aeroportuarias pretenden facilitar la seguridad y mejorar la experiencia de los pasajeros, pero nunca deben servir de excusa a las compañías aéreas para imponer recargos indebidos. Cobrar por el equipaje de mano es una práctica abusiva y es ilegal", afirma Pedro Miguel Madaleno, abogado especializado en derechos de los pasajeros aéreos y representante de AirHelp en Portugal.

Artículos esenciales

Además del equipaje, ciertos artículos esenciales están protegidos por la normativa y pueden transportarse sin coste adicional. Por ejemplo, facturar o transportar cochecitos y/o sillas de ruedas para personas con movilidad reducida nunca debe suponer un coste adicional para el pasajero. Tampoco se puede cobrar por llevar una mochila con artículos esenciales para el cuidado del bebé (leche de fórmula, pañales, biberones, comida, etc.), aunque el pasajero no pague por el espacio. Lo mismo ocurre con un botiquín que contenga medicamentos, oxígeno, dispositivos electrónicos, etc., para los pasajeros que puedan justificar, mediante un informe médico, que deben llevarlo consigo.

"El objetivo debe ser claro: una experiencia de viaje más sencilla y transparente, en la que la seguridad y la protección de los derechos de los pasajeros vayan de la mano", concluye AirHelp.