En 2024, más de 2.000 mujeres perdieron su empleo en Portugal por motivos relacionados con la maternidad, según la Comisión para la Igualdad en el Trabajo y el Empleo(CITE). La organización recibió 2.170 notificaciones de empresas que planeaban despedir o no renovar contratos a mujeres embarazadas, en situación de posparto, lactancia o permiso parental. Esta cifra representa la segunda más alta de los últimos cinco años, sólo superada en 2020, ya que el año pasado también se registró el mayor número de despidos en este periodo.

Según el informe anual del CITE, citado por Público, la mayoría de las comunicaciones en 2024 se refieren a no renovaciones de contratos temporales (1.894 casos), seguidas de ceses durante periodos de prueba (138) y despidos (138).

Aunque la presidenta de CITE, Carla Tavares, señala que no está claro si el aumento refleja un incremento de los casos reales o un mayor cumplimiento de las obligaciones legales por parte de las empresas, subraya que las cifras "siguen siendo constantemente elevadas". También señala que en muchos casos se trata de mujeres con nombres extranjeros, lo que pone de relieve la mayor vulnerabilidad de los trabajadores inmigrantes.

En los últimos cinco años, más de 9.300 personas se han visto afectadas por no renovaciones de contrato, despidos o extinciones durante el periodo de prueba en circunstancias similares, informa Público. A pesar de las intervenciones de CITE, desde 2022 sólo se han reincorporado 108 puestos de trabajo. El informe también señala cinco casos de acoso laboral contra mujeres y subraya que, aunque la brecha salarial de género se ha reducido, las mujeres siguen cobrando un 12,5% menos de salario base que los hombres y siguen estando infrarrepresentadas en los puestos de dirección y toma de decisiones.