Casi el 90% de los profesores de la OCDE están satisfechos con su trabajo, según TALIS 2024 - Encuesta Internacional sobre Enseñanza y Aprendizaje, la mayor encuesta internacional de profesores, en la que participaron más de 280.000 docentes de 55 sistemas educativos.
Los portugueses se encuentran entre los más felices, con un 94% que afirma estar satisfecho con su trabajo, según la encuesta, que analiza sus experiencias en el aula, las relaciones con colegas, alumnos y padres, y las condiciones de trabajo.
Aunque cada vez son menos los profesores que se declaran insatisfechos, muchos admiten que cambiarían de profesión: La mayoría de los jóvenes profesores portugueses (66%) afirma haber elegido la enseñanza como primera opción profesional, pero el 27% admite que dejará la profesión en los próximos cinco años (la media de la OCDE es del 20%).
La encuesta no da razones para el posible abandono, pero los investigadores señalan que hay que tener cuidado con las clases asignadas a los profesores más jóvenes, ya que "a menudo se da prioridad a la antigüedad, lo que puede colocar a los profesores menos experimentados en los entornos educativos más difíciles".
Este enfoque puede acarrear dos problemas: "Puede hacer que los profesores más jóvenes se desencanten de la profesión y que los alumnos vulnerables reciban una educación desigual".
Dificultades lingüísticas
En los 55 sistemas educativos analizados, los profesores más jóvenes tenían más alumnos con dificultades de comprensión lingüística que los de más edad, según la encuesta realizada en 17.000 centros.
Si nos fijamos de nuevo en los profesores portugueses, destacan por ser de los más veteranos de la OCDE y de los que más se quejan de los efectos de su trabajo: el 26% sufre mucho estrés (la media de la OCDE es del 19%), el 16% cree que su trabajo perjudica seriamente su salud mental (el 10% en la OCDE) y el 13% cree que incluso afecta a su salud física.
Entre los principales motivos de estrés, citan tener que realizar demasiadas tareas administrativas (79%) o rendir cuentas del rendimiento de los alumnos (79%).
Los profesores también están entre los que más se quejan de sus contratos de trabajo: Sólo el 39% está satisfecho con las condiciones de su empleo, mientras que la media de la OCDE es casi el doble (68%).
Hoy en día hay menos insatisfechos con los salarios portugueses, pero aun así, sólo el 13% está de acuerdo con sus sueldos, mientras que la media de la OCDE es tres veces superior (39%).
Escasez
La escasez de profesores en las escuelas es un problema que se siente prácticamente en todo el mundo, señala la OCDE, que considera que "un estatus social más alto en la profesión docente puede ayudar a atraer a la profesión a candidatos de alta calidad y a retener a los profesores experimentados".
Sin embargo, pocos en Portugal creen que se reconozca su trabajo: Sólo el 9% cree que los profesores son valorados por la sociedad (22% en la OCDE).
Dentro de las escuelas, más de la mitad cree que los padres y los alumnos los valoran, pero afirman que es más difícil que los alumnos de escuelas socioeconómicamente desfavorecidas (es decir, con más de un 30% de niños de familias pobres) los valoren.
Sólo el 4% cree que sus opiniones son tenidas en cuenta por los responsables políticos (una cifra cuatro veces inferior a la media de los países de la OCDE).
Ocho de cada ocho profesores dicen confiar en sus colegas; la mayoría reconoce varias cualidades en los directores y cree que se llevan bien con los alumnos.
En Portugal, la mitad de los profesores afirman alcanzar los objetivos de las clases en las siete áreas definidas por TALIS: claridad instructiva, activación cognitiva, retroalimentación, apoyo a la consolidación, adaptación de la instrucción a las diversas necesidades de los alumnos, apoyo al aprendizaje socioemocional de los alumnos y gestión del aula.
Curiosamente, el porcentaje de profesores con menos de cinco años de experiencia que afirman haber alcanzado objetivos en las siete áreas (45%) es similar al de los profesores experimentados (51%).
Entre los objetivos de las clases de los profesores, el de implicar a los alumnos en un trabajo estimulante (75%) es el que menos probabilidades tiene de alcanzarse.