¿Empieza a sentirse cada vez más agotado mental y físicamente a medida que los días se acortan? No está solo.
El frío y la oscuridad que se ciernen sobre nosotros en esta época del año pueden afectar mucho a nuestra salud en general, pero en lugar de caer en la melancolía, ¿has pensado en someterte a una ITV de otoño?
"Esta época del año es una tormenta perfecta para las enfermedades, porque la reducción de la luz solar disminuye los niveles de vitamina D, esencial para la función inmunitaria", explica la Dra. Elise Dallas, médico de cabecera del London General Practice. "Además, el ambiente se vuelve más frío y el aire más seco, por lo que las mucosas de la nariz y la garganta, que son el primer sistema de defensa del organismo, se vuelven menos buenas para combatir los virus aerotransportados".
Muchas personas también tienden a enfermar en esta época del año debido a una mayor exposición a nuevas personas y entornos.
"Muchos de nosotros volvemos a los colegios y a las oficinas, y utilizamos el transporte público en esta época del año, por lo que estamos mucho más cerca [en proximidad unos de otros], lo que favorece la transmisión viral", afirma Dallas.
Si quieres evitar todos los gérmenes desagradables y prosperar durante el resto del año, aquí tienes 8 formas sencillas, respaldadas por expertos, de llevar a cabo una revisión médica otoñal para restablecer tu organismo y potenciar tu salud de cara a los meses más fríos que se avecinan...
1. Revisiones rutinarias
"Reserve las revisiones pendientes de la tensión arterial, el colesterol, la diabetes y el tiroides", recomienda el Dr. Michael Zemenides, cofundador de la A-Z General Practice del Hospital Wellington, que forma parte de HCA Healthcare UK. "Si padeces una enfermedad de larga duración, programa tu revisión anual y asegúrate de que las recetas están al día. Cuanto mejor sea su estado de salud en los meses de invierno, mejor preparado estará para defenderse de las infecciones".
2. Mantente hidratado
"Mantente hidratado porque nuestras membranas mucosas necesitan permanecer húmedas para poder combatir las infecciones", dice Dallas. "La mayoría de la gente no suele beber suficiente agua, pero necesitas todos esos líquidos para combatir las infecciones y para experimentar menos niebla cerebral".
"Intenta dar prioridad a tomar un par de litros de agua antes de salir de casa cada mañana, y si no te gusta el sabor del agua puedes añadirle ingredientes como jengibre o menta".
Créditos: AP;
3. Vacunas al día
"Protéjase -y proteja a los que le rodean- con las vacunas contra la gripe y COVID-19 si reúne los requisitos", dice Zemenides. "Reducen el riesgo de enfermedad grave y hospitalización durante la temporada alta. Si no está seguro de cumplir los requisitos, hable con su médico de cabecera o farmacéutico.
"Ambas vacunas pueden administrarse de forma segura en la misma consulta para ahorrarte tiempo y asegurarte que estás totalmente protegido este invierno".
4. Priorizar el sueño
"Unas horas de oscuridad más prolongadas pueden confundir el ritmo natural del cuerpo, provocando un sueño interrumpido o excesivo", dice Zemenides. "La mala calidad del sueño afecta al equilibrio emocional, la concentración y la resistencia al estrés".
Dallas recomienda intentar mantener una rutina de sueño regular, incluso los fines de semana.
"Intenta dormir al menos siete, ocho o nueve horas cada noche y procura acostarte antes de medianoche", aconseja Dallas.
5. Encontrar formas productivas de controlar los niveles de estrés
"Las rutinas de otoño pueden aumentar el estrés y reducir la capacidad de recuperación", reconoce Zemenides. "Muchas personas notan que el estrés y el bajo estado de ánimo son más intensos durante los meses de invierno. Los días más cortos, el tiempo más frío y el aumento de las presiones estacionales pueden combinarse para afectar al bienestar mental y físico."
Dallas está de acuerdo y añade: "El estrés pone a nuestro cuerpo en modo de lucha o huida, y si eso ocurre todo el tiempo puede afectar a nuestro sistema inmunitario. Por eso, reservar 10 minutos al día para conectar con calma con uno mismo puede ser muy beneficioso. Hay aplicaciones como Calm que ofrecen pruebas gratuitas que pueden ayudar".
6. Aumenta tu consumo de vitamina D
Nuestros niveles de vitamina D tienden a bajar en los meses más fríos, por lo que los suplementos pueden ayudar.
"Entre octubre y marzo, toma 10 microgramos (400 UI) diarios de vitamina D e intenta incluir también fuentes dietéticas como el pescado azul, los huevos y los alimentos enriquecidos", recomienda Zemenides.
7. Mantente activo al aire libre
"El ejercicio es un calmante natural del estrés, que ayuda al organismo a controlar el cortisol y a mejorar el sueño y el estado de ánimo", dice Zemenides. "En invierno, las temperaturas más frías y los días más cortos suelen reducir la actividad al aire libre, lo que puede contribuir a elevar los niveles de estrés y tensión. Así que intenta mantenerte activo: incluso los paseos cortos diarios a la luz del día pueden levantar el ánimo".
8. Come alimentos que refuercen el sistema inmunitario
"Privilegia los alimentos de temporada que refuerzan el sistema inmunitario, como las verduras de hoja verde, los tubérculos, la calabaza, las bayas, las proteínas magras, los cereales integrales y las grasas saludables", recomienda Zemenides. "Haz comidas equilibradas y regulares para mantener la energía y la recuperación".