En declaraciones a la agencia de noticias Lusa, Eduardo Miranda señaló que, en el ámbito de la campaña de sensibilización para el registro obligatorio del seguro de responsabilidad civil por parte de los propietarios de alojamientos locales, "151 ayuntamientos ya han realizado esta notificación".
"La última tanda [de notificaciones] fue en noviembre", y los propietarios ausentes "deben completar este proceso antes de fin de año", añadió.
La Asociación Portuguesa de Alojamientos Locales(ALEP) calcula que, después de que los municipios restantes procedan a las notificaciones, presumiblemente "en enero o febrero", el proceso "podría estar concluido para el verano" de 2026, lo que se traduciría en "entre 40.000 y 45.000 cancelaciones" de Alojamientos Locales, mientras que "entre 85.000 y 90.000" alojamientos permanecerían activos.
Eduardo Miranda habló con Lusa en Óbidos, donde participa en el IV Congreso de Alojamiento Local.
El presidente de ALEP recordó que el proceso de notificación a los propietarios para que presenten su inscripción, que comenzó en junio, "se está llevando a cabo por agrupaciones de municipios", y que, de los aproximadamente 126.000 ó 127.000 alojamientos locales registrados, "78.000 ya han sido notificados". Una vez finalizado el plazo de inscripción de diez días, los respectivos ayuntamientos podrán "proceder a la baja" de aquellos que no cumplan con este requisito.
Eduardo Miranda también consideró que el Ayuntamiento de Lisboa, incluido en la primera tanda de notificaciones, "debería ser el primero en proceder a las cancelaciones, sobre todo porque, por su tamaño, se ha utilizado como piloto para ver si los sistemas funcionan".
"En Lisboa, ya hay un buen entendimiento de que siete mil inscripciones deben ser canceladas en esta fase final, de un total de 18.600", afirmó el presidente de ALEP, considerando que "más de un tercio de las inscripciones están siendo canceladas por inactividad, lo que significa que todos esos números utilizados en la discusión pública, en muchas parroquias, son completamente erróneos."
En el congreso, Eduardo Miranda llamó la atención sobre la importancia de adaptar las normativas municipales sobre alojamiento local a la realidad de cada municipio o parroquia del país, donde "1,8 millones de casas no se utilizan para vivienda."
Para Eduardo Miranda, "los ratios [relativos al porcentaje de alojamiento local que puede ser licenciado] tienen que adaptarse a las especificidades" de los territorios, teniendo en cuenta, por ejemplo, "la realidad del Algarve, donde "cerca del 50% de las casas son para vacaciones", por lo que la suspensión del alojamiento local "condiciona el turismo y la economía".
Participando en un panel con alcaldes de varios municipios del Oeste, en el que todos defendieron que existen condiciones para el crecimiento de los alquileres de corta duración en sus respectivos municipios, Eduardo Miranda destacó la importancia de realizar encuestas concretas sobre el número de viviendas y las tasas de alquileres de corta duración en funcionamiento para "poder prever cuándo es necesario imponer límites."








