El transbordador Santa Rita de Cássia, que comenzó a cruzar el río Miño en 1995, ha estado fuera de servicio desde 2020, inicialmente debido a las restricciones fronterizas por la pandemia de Covid-19 y, posteriormente, porque el pontón en España quedó inoperativo.

Tras la finalización de las obras en el muelle gallego en 2023, el ferry permaneció fuera de servicio debido al encenagamiento del río. El pasado mes de julio, el buque fue remolcado a un astillero de A Guarda para su evaluación.

Liliana Silva afirmó que la solución para garantizar la travesía del río Miño será "a través de un buque de poco calado, con capacidad para unas 50 o 60 personas".

La edil socialdemócrata hablaba durante una rueda de prensa de presentación de una candidatura al programa Interreg VI España-Portugal (POCTEP) 2021-2027, que fue aprobada y permitirá la creación formal de la Eurociudad Foz do Minho, que une Caminha, en el Alto Minho, y A Guarda y O Rosal, en Galicia.

"Se están manteniendo reuniones con los promotores del buque que garantizará esta travesía y está previsto que, en una fase posterior, se coordinen soluciones de conexión por carretera en el lado español, garantizando el transporte de pasajeros desde el muelle de Pasaxe hasta O Rosal y A Guarda", dijo Liliana Silva, citada en una nota enviada a las redacciones.

Según la alcaldesa, "dada la urgencia de la conexión fluvial, el ayuntamiento de Caminha ha incluido en el presupuesto del próximo año la reparación del pontón y la retirada de arena frente al mismo, en una inversión estimada entre 30 y 40 mil euros, garantizando así las condiciones necesarias para completar la conexión entre Caminha y A Guarda el próximo verano, utilizando un buque de poco calado."

Este mes, en una entrevista concedida al periódico caminhense, Liliana Silva afirmó que el presupuesto para la reparación del ferry Santa Rita de Cássia es de 1,2 millones de euros.

Según el periódico, el ferry lleva fondeado en el astillero desde el 25 de julio.

Puentes

Caminha es el único municipio del Valle del Miño que depende del transporte fluvial para garantizar una conexión regular con Galicia. Vila Nova de Cerveira, Valença, Monção y Melgaço cuentan con puentes internacionales.

En cuanto a la movilidad transfronteriza, Liliana Silva añadió que "el proceso de construcción de un enlace permanente por carretera entre Portugal y España en esta zona se está desarrollando a nivel de ambos gobiernos, e Infraestruturas de Portugal está preparando los trámites necesarios para el inicio de los estudios técnicos".

"Aunque se trata de un proceso a medio plazo, ya se han dado los primeros pasos para que esta conexión sea una realidad", afirmó.

En cuanto al aterramiento cerca del muelle de Caminha, Liliana Silva He aclaró que "existe financiación de la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente (APA) y que el dragado del río Miño será un tema que se abordará en la próxima Cumbre Ibérica, con el compromiso de completar este proceso en un plazo de dos años."